Estoy
tan lejos de lo que alguna vez fui
Que
mis amaneceres no son más que preludio de mi sentencia de muerte.
Abrumaría
las horas para que sea más leve este dolor
Me
he quedado sin aliento, ante esta lucha en busca de la verdad
-Enemiga
de mí- ansiando el perdón
Estoy
tan lejos de mí que ya no sé si estoy aquí
¿Quién
te dijo a ti que los poetas no matan?
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